sábado, 20 de marzo de 2010

...Resurge, alienta, grita, anda, combate,...

Cuando tratan las personas de ser mejor, de mejorar, siempre existe algo que los decepciona. Hoy día estamos viviendo momentos "difíciles" en los que el más listo es el que sobrevive y el astuto se equivoca más de lo común. Es increíble como en nuestro país y en todos los países del mundo no les importa la gente, ni los valores, ni tan siquiera los sentimientos. Es inevitable que políticos y poseedores de sillas importantes intenten mejorar la situación, y claro, el remedio siempre es peor que la enfermedad. ¿Cómo intentar llevar un país sin valores, sin sentimientos, sin conciencia? ¿Y qué del país apagado, silencioso, sometido? A veces se piensa que es mejor un político o un dictador, la diferencia, simple, uno lo escoge el pueblo (por cualquier razón "lógica") y el otro lo toma y ya (hace todo lo que le plazca).
Si el pueblo no despierta cómo es posible que mejoremos. Si no hacemos valer nuestros propios derechos como dejamos que alguien los haga valer por nosotros, acaso es mejor dar nuestra patria a tenerla y demostrarla. Es hora de que comencemos a despertarnos estamos En La Brecha...

En la Brecha de José de Diego

¡Ah desgraciado si el dolor te abate,
Si el cansancio tus miembros entumece!
Haz como el árbol seco: reverdece
Y como el germen enterrado: late.

Resurge, alienta, grita, anda combate,
Vibra, ondula, retruena, resplandece…
Haz como el rio9 con la lluvia: ¡crece!
Y como el mar contra la roca: ¡bate!

De la tormenta al iracundo empuje,
No has de balar, como el cordero triste,
Sino rugir, como la fiera ruge.

¡Levántate!, ¡revuélvete!, ¡resiste!
Haz como el toro acorralado: ¡muge!
O como el toro que no muge: ¡embiste!

Me encanta este poema de José de Diego, porque a pesar que se escribió hace varias décadas, en estos momentos es muy importante. Hacen falta más escritores de este modelo que no le teman a nada, ni a las críticas y al exilio que puedan decir la verdad libre y luchar para que el país mejore.

¿Qué tal te atreves?

viernes, 19 de marzo de 2010

Naturaleza Muerta

La palma lloraba
de tanto gritar
y que nadie, por su altitud,
la escuchara
Su vida se acortaba
cada tajo, cada golpe,
parecía que se iba a deshacer
en mil pedazos
Una sola cosa la amarraba
Su tierra, su única tierra
la cual poco a poco
también se desparecía
Ya no queda nada
solo su cuerpo
tirado sobre un mar
un mar de pajas.

Necesidad Especial

Qué importancia tiene
El respetar,
Qué importancia tiene
El querer mejorar,
Qué importancia tiene
Tener una meta,
Qué importancia tiene
Vivir en un país muerto.
Si
Muerto,
Muerto por las personas
Por la población
Por los animales
Por la naturaleza.
Acaso...
A alguien se le ocurrió resucitar,
Resurgir,
Empaparse de vida
No.
Todos siguen igual
Llenos de odio,
De rencor
De lujuria
De pecados.
Se necesita alguien
Ese alguien necesita de todos
Pero de que vale
Se necesitarían más
De lo que te imaginas
Para lograr algo tan grande
Tan bueno, tan fino
Tan lleno de espíritu
Algo llamado Alma.

jueves, 18 de marzo de 2010

Camino de Un Parque, Nemesio R. Canales

Nosotros los puertorriqueños siempre hemos tenido la dicha de tener grandes autores y de distintos tiempos. Hoy les presento a Nemesio R. Canales debido a que realmente estamos viviendo en un mundo urbanizado y en estos tiempos el calor esta "de madre."

Nemesio R Canales nació en Jayuya el 18 de diciembre de 1878. Estudio leyes y llego a ser abogado, político y escritor. Escribo varios artículos que fueron publicados la columna Paliques del periódico El Día. Fundó con Luis Lloréns Torres, el periódico Juan Bobo y las revistas Idearium y Cuasimodo
y fue director de La semana.
El 21 de enero de 1909 presento un proyecto el cual trataba sobre la emancipación de la mujer y este recibió grandes críticas, una de las cuales, la recibió de José de Diego cuando este alego que las mujeres son de la casa. Su proyecto fue rechazado y años más tarde Luis Muñoz Marín lo presento y le aplaudieron, sin embargo el único que felicito a Canales fue el mismo en una publicación a un diario de la isla.
En 1919 inicio un viaje por varios países, en los cuales dicto diversas conferencias culturales. En 1922 regreso a Puerto Rico y desempeño distintos cargo: procurador general auxiliar en el Departamento de Justicia y de catedrático en la Escuela de Leyes de la Universidad de Puerto Rico.
Entre sus obras se encuentran: la comedia El héroe galopante y las novelas Feliz Pareja, Hacia un Lejano Sol y Mi voluntad se ha muerto.
Cabe destacar que Nemesio r. canales escribía con varios seudónimos por ejemplo, Juan Bobo, N, Don Juan Manuel, Cesar, entre muchos otros.

Las distintas obras de Canales son excelentes y una de mis favoritas es Camino a de un Parque.
En este ensayo critica la visión del progreso entorno a la edificación en el siglo XX por falta de planificación (cualquier acercamiento a lo que estamos viviendo es pura realidad).

Camino de un Parque

Hace un calor tan grande, tan africano, que le derrite a uno las ganas de vivir.
Y en la tremenda angustia de este calor bárbaro, la idea de lo verde, de lo fresco, de lo eglógico, me persigue como una obsesión.
¡Que amable y que bello seria el mundo si estas ciudades secas ay antipáticas estuviesen rodeadas de frondosos bosques donde pudiera uno perderse en estas horas de perra canícula!
Pero en vano tiene uno la vista por todas partes buscando con histérico afán un trozo de verdor, un fragmento de égloga.
Aquí solo hay casas y mas casas - apiñadas unas sobre otras como si quisieran contar algo muy gordo al oído sobre las yermas y opacas vidas de sus dueños- y aceras y muros y techos de ardiente ladrillo que tuesta los ojos.
¡Que hombres los que edificaron esas ciudades! ¡Como se echa deber por todas partes su tosquedad terrible! Para ellos el sitio ideal para un pueblo era el más seco y el más plano, el que se asemejase más a una galleta. Su gran lujo consistía en tostarse dentro de los espesos muros de una casa hermética, sin acordarse nunca de las soberbias campiñas que estaban tan cerca.
Sabían aquellos hombres sudar la gota gorda en rudas faenas comerciales o agrícolas hasta reunir, para sus yernos generalmente, un capital más o menos grande que ellos no gozaban; pero ignoraban que el licor de la vida resulta una pócima demasiado amarga cuando no se le sabe echar de cuando en cuando su gota de poesía.
Y los hombres de hoy -hijos o nietos de aquellos- poco han adelantado en su visión del mundo. Quieren que haya cloacas, quieren que las calles sean adoquinadas, quieren progreso; pero para nada se acuerdan de que estamos en un clima tórrido donde la más elemental de las necesidades es un parque, un trozo de campiña libre donde poder tenderse, cuando el sol aprieta, al asombra de un gigantesco y susurrante árbol
¿Por qué Ponce no tiene un parque? ¿Por qué bizarra, <>, que tantas empresas generosas ha iniciado, no rompe su intrépida lanza en pro de ese elemento indispensable de ornato e higiene? ¿Es que es cosa tan difícil el hallazgo de unas pocas cuerdas de terreno propias para el objeto indicado? ¿ no nos brinda nuestra prodiga naturaleza, aquí, allá y mas allá, sitios deliciosos donde bastaría tender sencillamente una cerca para tener el parque sonado?
No es solo limpiando corrales y matando ratones como se higieniza un pueblo. Hay que darle también un trozo de campo en que -siquiera el domingo- sus pulmones gocen de un baño de oxigeno.
No es construyendo mas y mas escuelas como se hace cultura. La cultura no consiste en saber multiplicar y dividir ni meterse una gramática, una historia y un mapa en la cabeza. La cultura consiste en abrirse ventanas al espíritu por donde entre y salga en perene reflujo esa indecisa luz crepuscular que emana de la armonía y el misterio de las cosas. La cultura consiste en apropiarse y llevar dentro de uno algo así como un eco de ese latido eterno del mundo, que se anuncia lo mismo en el crujir de una rama que en la canción de un pájaro o el temblor de una estrella.
La cultura consiste en llevar cada cual en su mente un poquito de azul, un fragmento de cielo... ¡y también un girón, un girón blanco y suave de esa niebla que flota y que ondula sobre la paz de oración melancólica o de místico éxtasis de una cumbre lejana y altiva!...
Hay que ir, para buscar higiene y progreso cultural, más allá de la escuela. hay que coger el amable camino de un parque, de una playa, de una colina, de un monte, de un campo, de un rincón cualquiera saturado de naturaleza, donde haya mucho sol, mucho cielo, mucha brisa, mucha flor, mucha rama entrelazada, mucho follaje que borde sobre nuestra cabeza cansada y enferma un dosel de verdura y de paz.
Un cimbreante dosel bajo el cual nuestros jóvenes, seducidos por la belleza del sitio, sientan súbitamente el natural anhelo de acariciar los oídos de sus novias con música de versos.
Música de los versos de Bécquer, de Machado o de Darío que ahuyente de sus labios las chocarrerías e insulsez que aprendieron en tertulias de esquina o de café.
¡Música excelsa en cuyo fondo el temblor de la rama, de la canción y de la estrella, forma un ritmo que despierta con cada ondulación en nuestras almas... como un eco lejano y doliente del eterno e inmenso latido del corazón del mundo!

Bibliocausto

Hace mucho quería una obra que marcara la conciencia de las personas en cuanto a los libros y la falta de lectura. Este es un excelente reportaje por Ana Teresa Toro. Este explica lo que es la obra "bibliocauto" es una estupenda interpretación espero que les guste.


Cuanto menos se lee, más daño hace lo que se lee

Miguel de Unamuno

Imagínela. Está frente a sus ojos una hoguera gigantesca. Letras, palabras, oraciones, párrafos enteros derritiéndose... ideas. Tras el fuego, las cenizas, los polvorientos pensamientos que han pasado a ser nada, pues la memoria de quien los recuerde, con la muerte, también se vuelve ceniza.

Esa experiencia de la quema de libros que, en momentos en que se vive la llamada sociedad de la información pareciera tan distante, hoy resulta inquietantemente pertinente. Tan cercano como esta semana el sacerdote italiano Floriano Abrahamowicz -controversial personaje que pone en duda el Holocausto- quemó públicamente un libro del Concilio Vaticano II. No hace más de un par de años que en México se quemaron públicamente la serie de libros de Harry Potter por considerarlos textos de brujería y relativos a Satanás. Igualmente, cada año estudiantes de escuelas alrededor del mundo colocan en el portal YouTube las quemas de los textos académicos que han utilizado durante el año escolar. Y es que bastaría mirar el inicio del siglo XXI, que arrancó con la quema y saqueo de la Biblioteca Nacional y los archivos de Bagdad en Irak, para entender que hablar de un bibliocausto es hablar de una constante histórica.

De esta multiplicidad de historias de quema de libros y de la destrucción del patrimonio ilustrado de diversas culturas en distintos momentos históricos es que parte la propuesta de la pieza teatral “La Noche de los Bibliocaustos” de Ricardo Cobián Figeroux.

Se trata de un montaje multimedia que adapta y manipula fragmentos de obras de autores conocidos de diferentes épocas que han abordado el tema de los bibliocidios entrelazados con textos del autor.

“Es un gran mural intertextual. En vez de escenas, lo trabajo por cuadros vivos en movimiento con referencias y personajes que van desde el Siglo de Oro hasta la actualidad”, adelantó Cobián quien funge como productor artístico, director y autor de la obra que sube a escena hoy en funciones a la 1:00 p.m. y 8:00 p.m. y mañana a las 8:00 p.m. en el Teatro de la Universidad de Puerto Rico, recinto de Río Piedras. La pieza se presenta como parte del Festival Internacional de las Humanidades que se llevará a cabo durante este mes en dicho recinto de la UPR.

La obra cuenta con el patrocinio del Programa de Teatro y Danza del Instituto de Cultura Puertorriqueña (ICP); de la National Endownment for the Arts, a través del Programa de Apoyo a las Artes del ICP; de la Cátedra Carvajal y de la Facultad de Estudios Generales de la UPR.

El que la pieza se presente precisamente en un ambiente universitario cobra particular relevancia a la luz de los debates actuales que se discuten en los pasillos del recinto.

“Nosotros somos lectores, el libro -sea digital o impreso- es nuestra herramienta porque trabajamos con las ideas, con el patrimonio del pensamiento atesorado en los libros. Por eso la universidad viene dada como el lugar necesario para hacer el llamado. Además los bibliocaustos más grandes de la historia se han hecho con apoyo de los intelectuales”, opinó Cobián quien, sobre el tono de la pieza, reveló que hay mucho espacio para la parodia y para la risa, mas no para la carcajada o la risa fácil.

“Esto es un teatro de la palabra”, insiste con ese gesto de sonrisa de medio labio que surge entre dos personas que se saben conocedores de algún entendimiento común; como cuando se interpreta un chiste interno y las personas sonríen al saber que algo han descifrado.

“Esta misma universidad llevó a cabo actos de censura atroces. Esa libertad de cátedra ganada hay que reivindicarla siempre, porque no podemos estar seguros de que siempre será así. Diariamente, vemos como muchos derechos adquiridos se han invertido” añadió el autor, quien encuentra en las dinámicas del mercado del libro (pobre distribución y criterio editorial) y en las recientes censuras de obras en el Departamento de Educación fuertes resonancias con la pieza, por entender que son modos alternos de silenciar y de convertir las ideas en cenizas.

“Crean la ilusión de que las ideas circulan. Los fundamentalismos están más presentes que nunca, esa intolerancia a las ideas de otros. Estamos más abiertos a la diferencia, pero simultáneamente la perseguimos”, enfatizó el profesor de la Facultad de Estudios Generales.

Como hilo conductor, Cobián trabajó lo que llama la trilogía del poder representada por medio de tres personajes: un sacerdote, un político y un general. “Es el poder del Estado, el religioso y el ideológico que son los que siempre han estado detrás de este tipo de controles”, explica el autor, que se nutrió de reflexiones históricas, cómics, películas, novelas e imágenes que documentan las quemas de libros en la historia, entre otros elementos con los que intervendrá un elenco que combina actores con experiencia y jóvenes figuras de las tablas. De ese modo, rompen la brecha generacional y se insertan en un espacio ficticio, en una experiencia común.

Tomado de El Nuevo Dia 18/03/2010

martes, 16 de marzo de 2010

Hola

Hola,
querido lector:

Le deseo dar la bienvenida a la locura del lenguaje, puertorriqueño. Si, nuestra propia lengua, Español. Tanto que se usa y tanto que la queremos (claro porque la hablamos). En este blog encontraras información a cerca de muchas cosas y usted es el encargado de leerlas, de analizarlas y de hacer con ellas lo que le guste pero cuidado porque puede ser una opinión y en esto podemos diferir si gusta pero no negarla. Espero que te agrade y si no pues te comunicas conmigo y dime tu parecer.